La mayoría de las personas que están intentando dejar de fumar lo ha intentado al menos una o varias veces con anterioridad y no ha tenido éxito.
Los recursos que se utilizan más habitualmente para dejar de fumar son:
– Realizar un listado con los beneficios que se obtienen al abandonar este mal hábito.
– Terapia con Hipnosis.
– Cambiar el estilo o ámbito de vida que propicia esa adicción.
– El empleo de fármacos sustitutivos de la nicotina, como: Parches de nicotina, la goma de mascar, dulces medicados y los aerosoles. Los medicamentos con receta médica como el vareniclina (Chantix) y el bupropion (Zyban, Wellbutrin), pueden ayudar a disminuir los deseos de nicotina y otros síntomas de abstinencia.
Debes trata de ver estos intentos pasados no como fracasos sino como experiencias de aprendizaje y ahora prepárate para dar un nuevo enfoque a tu nuevo y definitivo intento:
1. Recuerda el momento y circunstancias de tu vida en que empezaste a fumar: Posiblemente eras muy joven, querías encajar en tu círculo de amistades o entablar amistades nuevas, era lo que la mayoría hacía como una especie de ritual de iniciación hacia la vida adulta para dejar de ser tratado como un niño/a, parecía algo muy atractivo en ese momento, etc. Hazte consciente de cómo empezaste a adquirir este hábito.
2. Analiza el momento de tu vida en el que te encuentras hoy y los motivos que te han llevado a decidir dejar de fumar. Si no estás totalmente convencido/a de que quieres dejar atrás este hábito, no merece la pena ni que lo intentes, sólo cuando estés convencido/a podrás empezar con tu proceso.
3. Observa todos los recursos de los que dispones para iniciar con garantías tu cambio hacia una vida más saludable y apóyate en ellos: amistades, familia, alimentación, técnicas de relajación, música, actividad física, artes plásticas, lectura, hobbies…
4. Una vez que tienes claro tu objetivo y el porqué quieres dejar de fumar, el primer paso antes de empezar a abandonar el hábito es reprogramar tu mente y deshacerte de muchas de las creencias que tienes sobre dejar de fumar, cómo:
- Dejar de fumar no es fácil
Hay mucha gente que deja de fumar de un día para otro, no necesitan ni ir bajando poco a poco el consumo, ni darse unas semanas o meses para controlar el impulso, ni cambiar otros hábitos a los que asocian el consumo de tabaco. Simplemente han tomado la firme decisión que es lo que deben hacer por su salud y si ellos pudieron, tú también. Así que empieza repitiendo esta frase: “Dejar de fumar es fácil”
- Dejar de fumar provoca ansiedad
No es cierto que dejar de fumar provoque ansiedad, puede haber síntomas ya que tu cuerpo va reajustándose y eliminando las toxinas que acumula de los cigarrillos; acoge estos síntomas como algo positivo y cada vez que los sientas repite:
“Mantengo mi cuerpo sano”
Si tienes ansiedad no es por dejar de fumar, reflexiona ¿qué es lo que realmente te está produciendo esa ansiedad? y utiliza herramientas que te ayuden a ver con claridad la solución a tu problema. Empieza a utilizar técnicas de control respiratorio, relajación y meditación.
Si necesitas ayuda para afrontar el problema acude a un psicólogo o terapeuta especializado.
- Dejar de fumar engorda
Dejar de fumar no engorda, si bien es cierto que la nicotina presente en el tabaco aumenta el ritmo metabólico del cuerpo, que gasta con más rapidez todas las calorías que ingiere. Al dejar de fumar, el ritmo metabólico se normaliza. Por eso, se puede producir un ligero aumento de peso, también porque el placer, relajación y saciedad que atribuyes al tabaco suele sustituirse por un aumento de la ingesta de algunos alimentos, sobre todo dulces, Planifica tus comidas para que no sean más calóricas de lo normal y si tienes necesidad de algo dulce toma fruta.
5. Una vez que hayas empezado a dejar de fumar, no ocupes tu mente con la idea de “no tengo que fumar”. Tener en el pensamiento algo que no quieres hacer no le resta poder sino todo lo contrario, atraes aquello que no quieres porque sigues sin quitar el fumar de tu cabeza. Así que cada vez que aparezcan pensamientos sobre fumar, respira de manera pausada y profunda al tiempo que te imaginas haciendo cualquier otra cosa más saludable y que te resulte placentero como paseando tranquilamente, realizando alguna actividad creativa como pintar, escribir, cocinar, visualízate practicando algún deporte, nadando en el mar, viajando … llena tu mente con cualquier otra actividad que te guste.
– Empieza a realizar alguna actividad física como caminar, correr, bailar, patinar, ir en bicicleta….
Realizar deporte o actividad física aumenta la producción de varios neurotransmisores entre ellos la dopamina (neurotransmisor del placer, asociado con la sensación de relajación), la serotonina (hormona de la felicidad que regula los estados de ánimo) y las endorfinas (regulan la ansiedad dando sensación de bienestar y satisfacción).
– Procura descansar bien, un sueño reparador es fundamental para encontrarte más vital y motivado a conseguir tus objetivos. Si lo necesitas, toma alguna infusión relajante después de cenar.
Hay un par de mantras que puedes utilizar y repetir justo antes de irte a dormir, estos son un par de ejemplos (puedes utilizar cualquier otra frase que te ayude a sentir que vas por el buen camino):
“Todos los días en todos los aspectos voy de mejor a mejor”,
“Me siento bien y motivado/a, atraigo a mi vida salud y bienestar”
Hay también muchos mantras ancestrales que puedes escuchar, su vibración irá penetrando en ti y te ayudaran a restaurar tu energía. En Youtube puedes encontrarlos:
– “ Hari Om Namah Shivaya Shiva Ra Namo”
– “Om Tare Tuttare Ture Soha”
– “ Ra Ma Da Sa, Sa Say So Hung”
– Si tienes alguna recaída no te angusties, ni te sientas culpable no pienses que has fracasado. Es algo normal. Vuelve a centrarte en tu objetivo y no pierdas la motivación. Considéralo como parte del proceso de cambio, hazte consciente de las emociones que te han impulsado a volver al viejo hábito e intenta ver, que otras opciones podrías haber utilizado en ese momento para no recaer y úsalas la próxima vez.
– Puede ayudarte a vencer el impulso el tomar menos cantidad de carnes grasas, alcohol, café y azúcares y tomar más cantidad de antioxidantes y reconstituyentes como manzanas, uvas, zanahorias, apio, vitamina C en forma de zumos de naranja, pomelo, etc. Puedes también hacerte un espray de vitamina C, utilizando ácido ascórbico o cristales (puedes encontrar en cualquier establecimiento que venda productos dietéticos) disuelto en agua. Disuelve tanta cantidad como puedas en unos 3 cl de agua, introduce la disolución en un frasco de espray y rocía hasta el fondo de la garganta cada vez que tengas ganas de fumar.
Como complemento contra la ansiedad puedes masticar o chupar un par de clavos de olor (especias) y/o chupar raíz de regaliz que a la vez que es beneficiosa para tratar dolencias como la bronquitis o tos, alivia también el ardor de estómago.
Y la mejor manera de hacer frente de manera natural al síndrome de abstinencia es tomar infusiones de raíz de valeriana.
Como vas a estar eliminando toxinas, aumenta la ingesta de líquidos en forma de agua, zumos naturales o infusiones.
– La terapia con flores de Bach resulta también muy efectiva; estas son algunas de las esencias que puedes utilizar:
- Agrimony, es el gran ansiolítico de este sistema floral, útil para todo tipo de adicciones producidas por un estado de ansiedad.
- Cherry Plum, se emplea en casos donde se teme perder el control, indicado para el tratamiento de adicciones. Confiere calma, serenidad y control mental y físico.
- Crab Apple, gran limpiador de impurezas en el cuerpo y también a nivel mental y espiritual.
- Larch, útil para dar confianza en quien se está deshabituando de algún vicio.
- Walnut, empleada para la adaptación a todo tipo de cambios.
La toma típica suele ser de 4 gotas, 4 veces al día. Se pueden verter las gotas directamente debajo de la lengua y retenerlas unos momentos antes de tragar. No pueden mezclarse más de 5 esencias, pues cuantas menos se añaden, más directa es la acción. Puedes también poner 2 o 3 gotas de cada una de las esencias anteriores en una botella de agua e ir bebiendo a lo largo del día.
Cuando vayas a utilizarlas consulta con algún terapeuta experto en flores de Bach que pueda orientarte o decirte cuales son las esencias que van mejor para tu caso particular.
– Utilización de mudras. Los mudras son gestos que se hacen con las manos. Las manos son un mapa de energía de nuestra conciencia y salud. Los yoguis hicieron un mapa de las áreas de las manos y sus reflejos asociados. Cada área de la mano conecta con una cierta parte del cuerpo o del cerebro y representa diferentes emociones y comportamientos. Cuando dejas de fumar, dejas el hábito de coger el cigarrillo y esa manera de colocar tu mano, si aprendes un par de mudras y te haces consciente de que la manera en que colocas tus manos activa ciertas partes de tu cerebro, podrás controlar tu energía y estado emocional. Lo más habitual es realizar el gesto durante 15 minutos, varias veces al día o siempre que lo necesites.
Algunos mudras que puedes usar a la hora de quitarte el hábito de fumar son:
- Mudra de la detoxificación: coloca la yema de tu dedo pulgar apoyada en la base de tu dedo anular. Este mudra remueve toxinas de la sangre, ayuda a eliminar recuerdos desagradables, malos hábitos, negatividad y miedos. Limpia y purifica mental, física y espiritualmente.
- Durga mudra: cierra el puño y coloca el dedo pulgar entre el dedo índice y el dedo medio. Es el mudra antipánico, calma los nervios, elimina miedos, restablece el orden en ti, elimina la ansiedad y da protección.
- Apana mudra: lleva las puntas de los dedos medio y anular hasta la punta del dedo pulgar, mantén el resto de dedos extendidos y relajados. Este es el gesto de la energía limpiadora. Te permite eliminar el aire viciado de tus pulmones y expulsar impurezas en todas sus formas.
– Aplicación de la geometría y el color.
Bien es sabido que el color actúa a un nivel muy profundo en nuestra psique y lo mismo sucede con las formas geométricas.
Visualizar un triángulo de color amarillo que está rodeado por un círculo o aro de color azul turquesa te puede ayudar.
Puedes dibujar tu propio símbolo y dejarlo presente en algún lugar en el que puedas verlo de manera habitual y meditar fijando la mirada en él.
El arquetipo del triángulo amarillo activa la libertad, el desapego, el cambio y la generosidad. Desvincula las ataduras persistentes en ciertos actos rutinarios, automatismos, compulsiones y tendencias a comportamientos que nos atrapan.
El círculo turquesa induce a la corrección de los códigos principales (o funciones) para el desarrollo de la salud, dando precisión a la “función” de cada célula, por lo que se considera un buen probiótico.
– Repaso del día. Cuando te vayas a dormir recuerda todas las cosas que has hecho a lo largo del día para llegar a tu objetivo y analiza que cosas podrías mejorar para el día siguiente hacerlas.
¿Cómo te sientes al recordar las cosas que has hecho bien para lograr tu objetivo? Lo importante es ir adquiriendo hábitos nuevos más saludables de manera fácil y natural, para que se conviertan en tu nuevo estilo de vida.
Bibliografía:
– “Flores de Bach. Patrón transpersonal y aplicaciones locales” Ricardo Orozco
– “Mudras para la vida moderna” Swami Saradananda. Ed. Edaf
– “Geometría y luz, una medicina para el alma” Marta Povo. Ed. ILS
– “La ley de la atracción” Esther y Jerry Hicks. Ed. Urano
– Curso de Naturopatía. Deusto Salud
Puedes consultar las webs:
https://www.cdc.gov/tobacco/campaign/tips/spanish/dejar-fumar/guia/index.html
https://dejardefumar.aecc.es/quiero.html