La importancia del autocuidado
La cuaerentena del Covid-19 nos está dejando un mensaje bien claro: cuídate para cuidar a los demás. El alejamiento social o “social distancing” está siendo aplicado alrededor del mundo con un solo objetivo: no te contagies, ni contagies. De esta forma, estamos cuidándonos a nosotros mismos, pero también a otros. La sociedad se ha enfrentado a este reto de forma conmemorable y seguirá marcado en la historia para el resto de los tiempos. Con el lema ya legendario: #Quedate en casa, estamos salvando vidas. En Universo Neurodiverso queremos dar un pequeño paso más y aprovechar este momento para convertir este acto ante circunstancias únicas en hábito. Prolonguemos la concienciación social más allá de la cuarentena. Entendamos la importancia del autocuidado como evento diario y no como circunstancial.
El autocuidado es fundamental para nuestro bienestar y salud, pero no solo para nosotros mismos sino para los de nuestro alrededor, nuestros hijos, padres, familia, amigos, vecinos… Existen actividades básicas comunes de autocuidado que son esenciales para tod@s como son asearse (ducharse, cepillarse los dientes, lavarse las manos…), alimentarse, vestirse, moverse… Luego están las actividades que son todavía más complicadas.
Las actividades instrumentales que consisten en tareas como: gestionar la compra, la casa, los gastos, nuestra propia salud (hacer ejercicio, pedir cita en el médico…) e incluso cuidar de otros. Y tod@s y cada uno de nosotr@s ha tenido un largo aprendizaje en todas estas tareas, unas se nos dan mejor que otras y más de una vez nos hemos encontrado desbordados por ellas.
Cambiemos el chip
Estas actividades tan mundanas y rutinarias que consideramos abiertamente como aburridas son lo que realmente definen el estado de salud de cada persona. Por ello debemos cambiar de actitud ante estas actividades. Os exponemos aquí unos datos (de la DGT, OMS y INE) sobre el autocuidado y su impacto en la salud general:
Todos estos hábitos de cuidado son imprescindibles para tod@s durante cualquier época de la vida para el bienestar propio, el de la sociedad y reducen gastos públicos de forma exponencial.
Invirtiendo más en prevención y en tiempo para cuidarnos, ahora nos asegura a la larga un ahorro y sobre todo una mejor vida.
Dicho esto, es necesario tener en cuenta que distintos grupos de edad son más sensibles a sufrir más riesgo por falta de unos hábitos que otros.
- Los más pequeños se ven más influidos por medidas de higiene y la seguridad del entorno.
- Los adolescentes por el ocio saludable.
- El adulto joven (20-30 años) son los que más sufren por falta de dieta saludable y actividad física (en esta época se engorda más que en el resto de la adultez).
- Los más mayores a su vez son más sensibles a la socialización y al ejercicio mental.
En conclusión, para ser un súper héroe no hay que tener súper fuerza, ni saber volar, lo que realmente te hace ser héroe es ser considerado contigo mismo y con los demás. Pequeños actos como tirar la basura en su sitio, lavarse las manos e incluso simplemente sonreír a los demás mejoran el mundo de forma exponencial.
